En mi vida siempre se han cumplido todos mis deseos. Sí, todos… pero siempre con una constante, a destiempo ¡
Siempre he tenido presente una frase que me decía mi padre,
- Dinita, hija, ten cuidado con lo que deseas, que a veces se cumple ¡!!
Y esa ha sido la constante en mi vida. Todo lo que he deseado se ha cumplido, aunque nunca en el momento oportuno.
Así que he decidido que este año para mi cumpleaños, aviso a navegantes, es ya mismo…, voy a pedir un temporizador de deseos… , a ver si alguno de los deseos que sueño en esta vida, por una vez, se me cumple a tiempo y en el momento oportuno y lo aprovecho ¡
Esta semana pasada me ocurrió algo muy especial, algo que pensé que jamás conseguiría, y que hacía mucho tiempo que había olvidado soñar, algo que, de tanto desearlo, me aburrió, me desilusionó y me hizo perder el interés. Ya no lo quería.
Y de pronto, y sin esperarlo, apareció, pero ya no era el momento, ni el lugar ¡ Así que tal como vino, se fue, inesperadamente, y sin hacer ruido, pero dejandome una sensación extraña, que no triste, de lo enrevesada y diabólica que, a veces, puede ser esta vida loca que nos ha tocado vivir.
Y eso me ha hecho preguntarmes si, relamente, somos conscientes de la vida que vivimos, o perdemos la mitad, por no decir toda, en proyectar unos planes de futuro, un estilo de vida de pelicula, y en verdad no nos damos cuenta de la realidad que vivimos, y lo peor, cuando ese “sueño americano” se materializa, ya no es el momento, ya no es el lugar…
Siempre he tenido presente una frase que me decía mi padre,
- Dinita, hija, ten cuidado con lo que deseas, que a veces se cumple ¡!!
Y esa ha sido la constante en mi vida. Todo lo que he deseado se ha cumplido, aunque nunca en el momento oportuno.
Así que he decidido que este año para mi cumpleaños, aviso a navegantes, es ya mismo…, voy a pedir un temporizador de deseos… , a ver si alguno de los deseos que sueño en esta vida, por una vez, se me cumple a tiempo y en el momento oportuno y lo aprovecho ¡
Esta semana pasada me ocurrió algo muy especial, algo que pensé que jamás conseguiría, y que hacía mucho tiempo que había olvidado soñar, algo que, de tanto desearlo, me aburrió, me desilusionó y me hizo perder el interés. Ya no lo quería.
Y de pronto, y sin esperarlo, apareció, pero ya no era el momento, ni el lugar ¡ Así que tal como vino, se fue, inesperadamente, y sin hacer ruido, pero dejandome una sensación extraña, que no triste, de lo enrevesada y diabólica que, a veces, puede ser esta vida loca que nos ha tocado vivir.
Y eso me ha hecho preguntarmes si, relamente, somos conscientes de la vida que vivimos, o perdemos la mitad, por no decir toda, en proyectar unos planes de futuro, un estilo de vida de pelicula, y en verdad no nos damos cuenta de la realidad que vivimos, y lo peor, cuando ese “sueño americano” se materializa, ya no es el momento, ya no es el lugar…
Vivimos soñando lo que soñamos para vivir, y eso creo que no es bueno.
Así que yo he decidido no soñar más, y vivir más despierta, disfrutando de lo que tengo a mi alrededor, y dejando de perder tiempo en imaginar lo que me gustaría vivir, porque muchas veces la realidad, afortunadamente, supera la ficción.
Lo he aprendido esta semana, la vida es para vivirla, y no para soñarla, y para eso ya me he equipado bien, un buen despertador, y mi temporizador de deseos ¡!!!
Así que yo he decidido no soñar más, y vivir más despierta, disfrutando de lo que tengo a mi alrededor, y dejando de perder tiempo en imaginar lo que me gustaría vivir, porque muchas veces la realidad, afortunadamente, supera la ficción.
Lo he aprendido esta semana, la vida es para vivirla, y no para soñarla, y para eso ya me he equipado bien, un buen despertador, y mi temporizador de deseos ¡!!!
